martes, 30 de junio de 2015

CONJUNCIÓN PLANETARIA


Hoy 30 de junio de 2015 ha tenido lugar unos de los más curiosos espectáculos que la mecánica celeste nos puede brindar: Una conjunción planetaria.
Cuando se da una aproximación visual o aparente entre dos o más astros, decimos que tiene lugar una conjunción planetaria. En este caso se trata de Venus y Júpiter.
Como podéis ver en la fotografía, hay dos puntos luminosos, que son los dos planetas mencionados. Venus, es el más brillante, y justo encima tenemos a Júpiter, el gigante gaseoso que aunque parece que está a punto de tocarse con Venus, en realidad se encuentra a algo más de 700 millones de kilómetros más alla.



En esta otra vista podéis ver un "Close-up" de ambos. El brillo de Venus es bastante superior, ya que está mucho más cerca de la tierra que Júpiter. Venus dista apenas 40 millones de kilómetros de nosotros y podríamos decir que es nuestro planeta gemelo en el sistema solar, ya que casi tiene el mismo tamaño que la tierra. Eso si, la suerte de ambos fué muy diferente, ya que mientras la tierra está situada justo en plena zona de habitabilidad de nuestro sistema, Venus está en una zona mucho más caliente  y cercana a nuestra estrella. En la superficie de venus, se funden las rocas. Temperaturas de 400 grados centígrados se encargan de hacer inhabitable el planeta.


En el caso de Júpiter, hablamos de otro tipo de planeta. Mientras Venus forma parte de los denominados planetas rocosos o interiores, Júpiter pertenece al reino de los llamados "gigantes gaseosos".
Este tipo de planetas son mucho más grandes y están formados por gas principalmente y en el centro un nucleo rocoso que permanece bajo presiones inimaginables.
Júpiter es una estrella fallida, ya que si hubiese tenido un par de veces la masa que en realidad tiene, se hubiesen generado reacciones nucleares en su interior y literalmente, se habría encendido y disfrutariamos de un sistema solar con dos soles en lugar de uno, lo que significaria que durante largo períodos de tiempo, no tendríamos noche, tal y como la conocemos, y sólo cuando júpiter y el sol estuviesen juntos en la misma zona del cielo, podríamos disfrutar de cielos nocturnos.